BODEGA COLOMÉ Y THIBAUT DELMOTTE, FILOSOFÍA SINÉRGICA E HISTORIA VIVA DEL VINO ARGENTINO

BODEGA COLOMÉ Y THIBAUT DELMOTTE, FILOSOFÍA SINÉRGICA E HISTORIA VIVA DEL VINO ARGENTINO

La Bodega Colomé es una leyenda en la historia del vino de Argentina. La misma data del año 1831 y desde el año 2001 pertenece a Donald (recientemente fallecido) y Úrsula Hess para seguir haciendo vinos distintivos de los Valles Calchaquíes, hoy continuado el proyecto por sus hijos.

Con una ubicación que es única, el pueblo Colomé se moviliza en torno a la Bodega. Su construcción colonial se combina con toda la tecnología actual para elaborar vinos, y también, con las nuevas tendencias enológicas de elaboración. Sus viñedos ubicados en Colomé como en Payogasta le dan entidad y lema a sus vinos: “Altura Máxima”. 



Colomé es esa clase de bodegas clásicas en la cuál hace más de una década viene trabajando en un concepto muy claro de sentido de pertenencia con vinos de un estilo más bebible, donde el factor acidez y la textura tánica juegan un papel preponderante.

Si uno toma como un trazador válido para comprender éste cambio de la bodega, puede recordar el Malbec Estate 2008 de etiqueta bordó, por ejemplo, que era una bomba norteña de fruta madura con un color empetrolado bien de la época; hoy, ése vino pasó a tener colores violáceos y azulados con un perfil de frutas rojas, más jugoso y texturado. Amén de los vientos de cambio en los vinos que se hacen hoy en Argentina, Colomé no quedó al margen de esa lógica, aunque en algunas de sus líneas se juega un poco más (línea Single Vineyard) y otras un poco menos (línea 1831), pero los vinos en general han tenido un proceso de cambio y de transición hacia lo más jugoso.

Asimismo es interesante el trabajo que el enólogo Thibaut Delmotte, viene desarrollando desde el 2005 junto a la bodega. Su afición por el Malbec y la Pinot Noir a la vez puso en el tapete el desafío de hacer grandes vinos con dos variedades particularmente muy diferentes. El Malbec ya sabemos lo que es en Argentina y como se expresa tenazmente en el NOA, pero lo peculiar es su gran trabajo con una variedad de climas fríos y de ciclo corto como es la Pinot Noir. En donde, la búsqueda de climas fríos se hace a través de la altura, con un manejo superior de la canopia para que esa altura no sea un “boomerang” ultravioleta por la cercanía al sol afectando la delicadeza de la variedad. 



Thibaut es uno de los que más entiende y cómo se expresan los vinos en estos lugares. La posibilidad de crear su propia marca “Familia Delmotte” en torno a su trabajo en Colomé, es un ejemplo de simbiosis replicable en pocas situaciones en nuestro país con enólogos y bodegas. La bodega se nutre del “Knowledge” de Thibaut y, a su vez, él se nutre de la posibilidad que le brindó y brinda la bodega para poder realizar vinos equilibrados en ambos lugares donde los desarrolla.

Ésta posibilidad que tuvo Thibaut de haber adquirido cinco hectáreas a la bodega Colomé en Payogasta hace menos de una década para su proyecto personal, no solo va a poner en valor lo que el Malbec puede seguir dando en la región, sino también, potenciar las posibles bondades de la misma con algunas variedades como la Bonarda, la Garnacha, la Syrah y la Mourvedre en las tintas y, la Chardonnay y la Sauvignon Blanc en blancas, ampliando la aparente diversidad que la región puede dar. 



Hablar de Colomé redunda en calidad y conocimiento en el mercado Argentino. La bodega tiene uno de los Torrontés más reconocidos y muy consumido por el argentino bebedor y no tan bebedor de vino. Esto explica que los vinos están muy buenos a precios que no son exorbitantes para el común de la media del consumidor nacional. Además, es particular lo que sucede con ese vino y esa variedad, ya que recién ahora se habla de manera altisonante sobre lo que hace años se viene trabajando con la Torrontés en la región para que deje de tener toda esa exuberancia de frutas tropicales y sucrosidad, para dar lugar a una paleta más ancha en nariz, a su vez más vertical en la boca tendiente a aromas y sabores herbarios con la vibración de vinos jugosos por su destacada acidez.

Colomé lo viene manejando a la perfección hace tiempo y con la torrontés “Estate” tiene una de mejores relaciones precio calidad del mercado sumándole además ésta hermosa transición de elaboración que viene desarrollándose también por varios productores del valle. 

Los vinos comprenden al mercado y entre tanto terroir agreste, salen vinos finos, filosos y con personalidad implacable de nuestro NOA. Hemos probado algunos vinos tanto de la Bodega como de la Familia (Thibaut) Delmotte, llevándonos gratas sorpresas:

FAMILIA DELMOTTE

THIBAUT NATURAL 2020

Malbec natural sin agregados químicos, sin filtrar y sin sulfitos. Uvas proveniente de Cachi Adentro, de una finca sustentable de un valle cerrado a 2600 m.s.n.m. Suelo Franco Arcilloso. Sin madera. Utilización del huevo como recipiente vinario para su estabilización y crianza. Levaduras indígenas o nativas. En vista se aprecia rubí profundo con aros violáceos. Su nariz es herbácea, fruta roja fresca, floral y perfumado a chañar y otras flores, especiado a pimienta blanca. Umami de reducción de carne. Geosmina de terrosidad. Cáscara de naranja y kinoto. En boca es de entrada jugosa por su muy buena acidez, taninos finos y de grano fino, fruta rojinegra crujiente como moras, frutillas, estragón, balsámico de alcanfor, yogurt con frutas rojas. El final es largo, herbario y seco. 

Tomar mejor entre: 2023-2025

PTS VAS: 93+/100

THIBAUT DELMOTTE MALBEC 2019

Malbec de Payogasta, uvas provenientes de un valle abierto con suelos franco arenosos con algo de arcilla a 2600 m.s.n.m. Se cosecha más tarde y se vinifica con levaduras indígenas. Maceración corta en huevos de cemento, remontajes en tanque inoxidable de manera suave dos veces por día. Fermentación estable a 22 grados celsius. Criado durante 12 meses de barricas (15 % nueva de roble francés, 85 % varios usos). En vista se aprecia bordó granate. La nariz viaja por la herbaridad, especias de tomillo y estragón, laurel, perfumada y floral a chañar, fruta negra de moras y arándanos. Salino de frutos secos con sal. Fruta roja y negra, especiada. Estragón. Bálsamico de alcanfor y lavanda. Vainillina de vainilla en chaucha y Crème Brûlée. La boca tiene una entrada jugosa por su muy buena acidez, afrutado, con una maloláctica de yogurt que aporta volumen. Frutas rojas y negras (moras, cassis y arándanos) crujientes, algo de polvo de tiza y fineza elegante. El final es largo, seco de taninos texturados y especias amargas de estragón. 

Tomar mejor entre: 2023-2029

PTS VAS: 94+/100

PINOT NOIR ALTURA MÁXIMA 2020

Pinot Noir de Payogasta, sobre suelos pedregosos, de buen drenaje, con piedra volcánica (que aportaría sensación táctil según Thibaut), con granito gris y rosado (que aportaría frescura según lo informado por Thibaut), 3 horas al norte de la bodega. 3111 mts de altura. 5 hectáreas de pinot noir de la viña. Se elabora con un ⅓ despalillado, ⅓ racimo entero y ⅓ despalillado al mejor estilo “alfajor o torta” de Pinot, con el objetivo de integrar más lo taninos que puedan aportar los racimos enteros. Maceración corta de 10-12 días. Criado en barricas de 12 meses de varios usos. Fermendación a menos de 26 grados celsius para evitar aromas y sustancias indeseables. La vista es rubí traslúcido y brillante. La nariz viaja por las cenizas, fruta roja de frutillas, frambuesas, cassis, geosmina de terrosidad, herbáceo y especiado. Balsámicos alcanforados pero sutiles. Nuez moscada. Flores de chañar. La boca es de entrada de afrutada con muy buena acidez, yogurt de frutillas y frambuesas, herbáceo, umami de hongos, taninos finos y elegantes. Aterciopelado paladar y elegante volumen. Largo final, fruta roja y delicada sucrosidad.

Tomar mejor entre: 2023-2030

PTS VAS: 93/100

EL ARENAL SINGLE VINEYARD 2020 MALBEC

Malbec de Payogasta a 2600 m.s.n.m. Suelos arenosos producto de su cercanía al río y aporte eólico erosivo. El viñedo tiene 45 hectáreas. El vino sale de dos parcelas, una del año 2000 y otra del año 2009/2011. Desbrote y poda para ralear y lograr concentración. La búsqueda del vino es buscar fruta negra y sucrosidad. Se cosecha el 15 de marzo aproximadamente. Maceración en frío 4 días, sin extracción de taninos. Fermentación alcohólica a 22 grados celsius, remontaje luego de uno cada dos días, luego se juntan las dos parcelas elaboradas, dejándose macerar con quita de borra para suavizar taninos. Criado en barricas de 500 litros durante 12 meses de tostado medio ligero. La vista es de rojo rubí con aros violáceos con buena intensidad colorante. En nariz es de entrada con fruta azul de arándanos, cassis y moras. Alcanfor, hierbas silvestres, succínico salino y floral a lavanda y chañar. Tomillo y eneldo. Pimienta blanca. Hojas verdes de alfalfa. Nuez moscada. La boca es de impacto de fruta negra especiada, estragón, polvo de tiza y muy herbáceo. Muy buena acidez y taninos en textura pero marcados. Torrados sutiles, ahumados, cacao y tostados de caramelo amargo. Chutney de especias. Estragón. Se aprecia vertical hacia el final de boca que es largo, seco y de especias amargas. Para guardar mucho por su gran potencial. 

Tomar mejor entre: 2024-2035

PTS VAS: 95/100

1831 MALBEC 2019

Malbec de la Finca Colomé, 100 % de su viñedo viejo. 100-150 años de antigüedad de viñedo. 2300 m.s.n.m. 8 hectáreas. Para éste vino se elige planta por planta para lograr vigor equilibrado entre fruta y área foliar. A mediados de marzo se cosecha aproximadamente. Fermentación y maceración en tanque inoxidable. Criado durante 18 meses de barrica con solo un 40 % de barrica nueva. Lo novedoso es que hoy éste vino por primera vez está por debajo de 15 % de barricas nuevas. Vista de rojo rubí. Nariz de fruta negra madura de mora y ciruelas, herbáceo a yerba mate y especiado de pimienta negra estragón, balsámicos de alcanfor. Geosmina de terrosidad. Frutos secos salinos de maní y cajú. Bouquet de caja de cigarrillos y tabaco. En boca es de entrada firme y “full body” de frutas negras de buena sucrosidad, fresca, herbácea y especiada de estragón, laurel, orégano, con taninos texturados de grano fino. Bouquet de tostados de barrica, chocolate amargo y cacao. Cedro y ahumados. Largo final, afrutado y amargo de cacao. 

Tomar mejor entre: 2023-2034

PTS VAS: 94+/100

Una bodega que maneja un estilo consistente por años debe respetar al consumidor, y Colomé mantiene sobriamente sus vinos para que los mismos no pierdan esa consistencia y personalidad que tanto buscan sus adeptos. Aunque vemos con beneplácito hacer vinos más bebibles y utilizar recipientes de madera más grandes garantizando que el hilo conductor de sus vinos sean su acidez y la textura tánica proveniente de la uva mostrando la gran diversidad y plasticidad que el Norte Argentino puede dar.



El trabajo de Colomé verdaderamente más allá de sus viñas de antaño, es patrimonio cultural tanto por el desarrollo endógeno que produce en su zona de influencia sino también por hacer vinos en climas extremos que solo en la línea “Altura Maxima” se pueden mostrar.

De los mejores vinos que hemos probado francamente en nuestro periplo por el NOA Argentino.